Rápido, rápido, rápido,
Arde, arde, arde,
Crepita, crepita, crepita,
Danza,
Golpea tus tambores de humo,
Golpea tu memoria,
Dale al aire
Tu voz derrotada,
Airea tu voz
Entre espirales deambulantes
Y golpea repetido.
Repite, repite, repite.
Alfredo es entrañablemente indescriptible, eternamente enamorado, inevitablemente solitario, indiscutiblemente atemporal,"lapón en tantas cosas y al mismo tiempo tropical vocacionario". Alfredo, ogro gruñón que se derrite ante un beso en la frente, cañaílla exiliado en La Isla, buscador de no se sabe muy bien qué. Creador, músico, poeta. Escribe versos en trozos de papel, los siembra en el suelo de algún bar, en las calles de La Isla o en algunos corazones y los deja crecer. Alfredo es Alfredo.
1 comentario:
Sugerente poema. ¡Me encanta!
Publicar un comentario